Dalai Lama ‘etiquetado injustamente’ por video de lengua: gobierno del Tíbet en el exilio
NUEVA DELHI: El jefe del gobierno del Tíbet en el exilio defendió el jueves (13 de abril) al Dalai Lama por las imágenes de él pidiéndole a un niño que se chupe la lengua, diciendo que el incidente había demostrado el lado inocente y afectuoso del líder espiritual.
El premio Nobel de la paz se disculpó después de que las imágenes de un evento público, que también lo muestran aparentemente besando al niño en los labios, se volvieron virales, lo que provocó una ola de comentarios en las redes sociales de que su comportamiento equivalía a abuso.
Penpa Tsering, el sikyong (líder político) de la Administración Central Tibetana en el exilio, dijo que el Dalai Lama había sido “etiquetado injustamente con todo tipo de nombres que realmente hieren el sentimiento de todos sus seguidores”.
El “comportamiento cariñoso de abuelo inocente” del hombre de 87 años que se muestra en las imágenes había sido malinterpretado, dijo Tsering a los periodistas en Nueva Delhi, y agregó que una vida de celibato y práctica espiritual había llevado al Dalai Lama “más allá de los placeres sensoriales”.
El videoclip, filmado en febrero y difundido este mes, ha sido visto más de 1 millón de veces en Twitter.
Tsering dijo que las investigaciones mostraron que “fuentes pro chinas” estuvieron involucradas en hacer que se volviera viral, y agregó que “no se puede ignorar el ángulo político de este incidente”.
Los funcionarios de la embajada china en Nueva Delhi no estuvieron disponibles de inmediato para hacer comentarios.
El Dalai Lama huyó a la India en 1959 después de un levantamiento fallido contra el gobierno chino en el Tíbet. El ejército chino entró y tomó el control en 1951.
Ha trabajado durante décadas para obtener apoyo mundial para la autonomía lingüística y cultural en su patria remota y montañosa situada entre India y China.
Beijing lo ha acusado de fomentar el separatismo y no reconoce al gobierno del Tíbet en el exilio, que representa a unos 100.000 tibetanos que viven en unos 30 países.
